El ladron de orquideas

Deliver me from Swedish furniture

Ya nos lo avisaba Tyler Durden en el Club de la Lucha "Libranos de la decoración sueca" y parece que por fin podré hacerle caso.

Ayer acudimos a ese lugar que tanto me gusta con la sana intención de cambiar un espejo que se había comprado la santa que me aguanta que resultó estar roto y para que se agenciase una mesa de ordenador.

La mala suerte quiso que no tuviesemos el ticket de compra necesario para el cambio, con lo cual el dependiente no accedió a darnos uno que no estuviese ro, escudandose que podíamos haberlo roto nosotros. Ante esta circunstancia, y bajo la presión que supone mi cara de asco en cuanto entro en ese sitio, mi Santa decidió que nunca más volvería a entrar en el Ikea. Al final mis meses de charlas y explicaciones sobre lo feos que son los muebles, la mala calidad que tienen y lo caros que son han surtido efecto. A ver cuanto la dura.

Además encontramos en el local de al lado una mesa de ordenador mucho mas chula que la que ella había pensado y a mitad de precio. Con ese dinero de sobra yo aproveché para comprarme unos cuantos Dividíes.

Luego que los espejos no hayan quedado todo lo paralelos que debían haber quedado ya no es culpa de los suecos.

Es culpa es de que soy un inútil.

Sonando: Malaga - Joao Gilberto